HILO DE POEMAS
I
A veces debemos saber que estamos
Para resguardar sin dar tregua alguna
Cual vigía celeste enviado por Dios
Y proteger con todo a ese ser amado.
I
A veces debemos saber que estamos
Para resguardar sin dar tregua alguna
Cual vigía celeste enviado por Dios
Y proteger con todo a ese ser amado.
II
Viviré por ti y para ti
A pesar de las heridas
Y los golpes que recibí
Al silenciar las miradas
Que decían cuánto te amaba.
A pesar de las heridas
Y los golpes que recibí
Al silenciar las miradas
Que decían cuánto te amaba.
III
Cuántas ganas de abrazarte
y robarte los suspiros del pecho
llevarte con mis caricias a soñar
en una eternidad más allá de mi.
y robarte los suspiros del pecho
llevarte con mis caricias a soñar
en una eternidad más allá de mi.
IV
Me gustas mucho
Y tu voz me arrulla,
Sueño contigo
Vestida de luna...
Y tu voz me arrulla,
Sueño contigo
Vestida de luna...
V
Te dejo un beso enclavado
en la imaginación y la piel,
cuando susurras mi nombre
y un te amo al verme marchar.
en la imaginación y la piel,
cuando susurras mi nombre
y un te amo al verme marchar.
VI
Dame tu silueta al caer la tarde
y la convertiré en mi único castillo,
besa el sol con tus mejillas
y yo besaré tu figura llena de luz.
y la convertiré en mi único castillo,
besa el sol con tus mejillas
y yo besaré tu figura llena de luz.
VII
Quiero un beso tuyo
con sabor a miel
de primera colecta,
suave, tenue, limpio,
que me lleve al cielo
y me deje allí por siempre.
con sabor a miel
de primera colecta,
suave, tenue, limpio,
que me lleve al cielo
y me deje allí por siempre.
VIII
Mil pasiones por dar
Directo en tu dulce alma,
Piel y placeres extremos
Que van más allá de una noche.
Directo en tu dulce alma,
Piel y placeres extremos
Que van más allá de una noche.
ENERO DE 2016
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