martes, 14 de febrero de 2012

Música de amor



Escribamos juntos notas de amor,
que nos transporten al pentagrama de la pasión
donde los bemoles son nuestro diario cantar
y la aurora se viste en clave de sol;

Dejemos que la melodía y el ritmo
conjuguen su sabor latino
para bailar en compás de 3/4
y enamorarnos bajo una frondosa balada;

Hagamos que el amor brote
aún sin instrumentos musicales,
pues nuestros corazones ya conocen
el maravilloso sonido de su propia canción.

lunes, 13 de febrero de 2012

SIN PALABRAS

Fue el amor y nada más,
no hubo receta alguna
o historias alegóricas demás
que nos acompañaran bajo la luna,
aquella que por primera vez
recogió nuestros verbos entrelazados,
y nos vistió de algo mutuo
que combinó melancolía y sonrisas,
sentimiento y caricias,
abrazos y poesía,
cuando solo era nuestro espacio
en el remanso de nuestra soledad.

Nos envolvió la energía
que emanaba de nuestros cuerpos
y brotaba con cada sílaba
destilada en los dedos
que presurosos armonizaban
la danza que nuestro corazón tenía
cuando las risas resonaban
cual timbales del jardín donde crecías,
bella, frondosa y singular,
siendo la esencia vital
de todo el universo,
ese universo nuestro y de nadie más.

Fueron los días,
rosas que marcaron tu vereda
y yo un simple jardinero
en medio del color sin igual
de tu hermosa presencia
al caminar junto a mi
en esta estrecha senda
que ahora transitamos,
y que siendo aún como soy
me tomaste de la mano
para juntos poder bailar
aún bajo nubes grises que goteaban,
en aquellos días sin sol.

Sobran los porqués
para expresar lo que el corazón siente
lo que hace de mi
un alma viviente
enamorada locamente
de la dama que eres
que conquistó mis momentos de amor,
con el solo roce de sus manos
sobre mi alma vestida de tus risas,
fueron los saberes de tus besos
que cambiaron la amargura de labios
en suave y dulce miel;
fue un impulso del corazón que nos unió,
sin decires, sin pretextos o excusas,
sin palabras, solamente el amor.

jueves, 9 de febrero de 2012

Semántica



Hay una semántica del deseo y el placer
que habita en tu cuerpo que no puedo evitar,
se conjuga con mis verbos para acentuar
cada adjetivo que dilato
con la punta de mi lengua al besarte,
convirtiéndose en adverbios
poderosamente transformadores de mis letras,
morfemas apasionados que plasmo
con tinta indeleble en el papiro de tu cuerpo.

miércoles, 8 de febrero de 2012

Ella



La hallé en mi cama aguardándome
con el rostro sin mirada,
perdida en las sombras de la esquina
que se confundían con las telarañas
que rebotaban de punta a punta
en ese cuarto viejo y sin limpiar,

allí hizo su espacio
y sin preguntar se recostó
sin querer descansar
solo por el placer
de robarle espacio a mi comodidad,

sin aparente propósito
guardó mis libros favoritos
debajo de su vientre
y los mojó con el sudor
de sus lágrimas cansadas
de tanto brotar y secarse,

desesperó mis sábanas al punto
que le salieron arrugas
y sobre ellas las marcas hundidas
de sus nudillos bañados de ollín,
corroídos de tanto golpear al viento;

Allí estaba inerte
semi muerta en un valle de dolor,
el desierto le brotaba de su boca
llenando de arena mi almohada
con la imprudencia de un volcán vivo
y dispuesto a destruir todo a su paso
destruirme sin mediar palabra;

La observaba sin querer,
por curiosidad, sabiendo que no debía
pero su estocada de muerte
era la belleza suprema del dolor,

afloraban de sus labios las espinas
y su mirada evocaba la soledad
era morbosamente atractiva
como un animal muerto
en medio de la ruta del olvido;

La hallé sin vida y pálida
pero seductora como el buen vino
aguardando que la bebiera por completo
lo que ella desconocía
era que había renunciado a sus encantos
pues una vez había caído en su nido mortal,

la miré cual despojo a despreciar
y di un paso atrás, cerré la puerta y me fui,
allí quedó la depresión burlada
aguardando que alguien más se acercara
y durmiera otra noche junto a ella,
inundado de su aberrante aliento de maldad.

Razones



No necesito razones para amarte

La sazón de mis actos

La da el corazón,


No necesito los porqués

Pues hay suficiente de ti

En cada uno de mis sentidos,


No hace falta los tequieros

Cuando los teamos

Surcan mis venas uno a uno,


No busco excusas

Para robarte un beso

En el silencio de la noche,


No espero una fecha de calendario

Para abrir mi corazón

Y obsequiarte lo mejor de él,


No hay justificaciones previas,

Antesalas o preludios

Para expresar cuánto te amo,


Basta tu presencia continua

para desbordarme de amor

en el infinito de sus colores y haberes.