lunes, 18 de febrero de 2019

Entenebrecido


Entenebrecido por la vida
y sus lazos que amarran
a la pata de una vieja silla,
el alma en el suelo se derrama,
Callando y cayendo,
Llorando y lloviendo,
Crujiendo y sufriendo,
Escribiendo falso testamento
Porque la poesía no es
y la suave brisa ahora quema,
el canto de las aves es nefasto
cuando el dolor se enseñorea.
Letras, letras y más letras
acumuladas en mi escritorio
gritando a todas voces
que me liberen de la cautividad.
Mario Asturias Villa
Serie: Susurros de la noche

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